31 agosto, 2010
29 agosto, 2010
En la próxima trataría de cometer más errores.
No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más.
Sería más tonto de lo que he sido, de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad.
Sería menos higiénico.
Correría más riesgos, haría más viajes, contemplaría más atardeceres, subiría más montañas, nadaría más ríos.
Iría a más lugares adonde nunca he ido, comería más helados y menos habas, tendría más problemas reales y menos imaginarios.
Yo fui una de esas personas que vivió sensata y prolíficamente cada minuto de su vida; claro que tuve momentos de alegría.
Pero si pudiera volver atrás trataría de tener solamente buenos momentos.
Por si no lo saben, de eso está hecha la vida, sólo de momentos; no te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos que nunca iban a ninguna parte sin termómetro, una bolsa de agua caliente, un paraguas y un paracaídas; Si pudiera volver a vivir, viajaría más liviano.
Si pudiera volver a vivir comenzaría a andar descalzo a principios de la primavera y seguiría así hasta concluir el otoño.
Daría más vueltas en calesita, contemplaría más amaneceres y jugaría con más niños, si tuviera otra vez la vida por delante.
Pero ya tengo 85 años y sé que me estoy muriendo.
Borges.
27 agosto, 2010
Uno va a decir que si, y sabe lo que le viene junto al si: Los malentendidos, las escenitas de celos, los caprichos, las críticas. Y dice si aún sabiendo que todo esto siempre pasa, dice si sabiendo que va a enamorarse, que va a volver a sufrir, que en el amor siempre alguien termina peor que el otro, que los miedos, que la confianza, que si me deja, que si me ilusiona y termino solo, que me gusta más, que me gusta menos, que no me entiende, que me llama mucho, o no me llama nunca, que me hago la cabeza: ¡TANTOS PROBLEMAS!.
El amor es así, va acompañado por la agridulce sensación de constante felicidad y tristezas, y si es verdadero, si es amor real, más instenso es todavía. Pero sin embargo, a pesar de todos estos problemas, todos terminamos apostando al amor y decimos si y sabemos que nos vamos a llenar de problemas, pero hermosos problemas. ¿Qué valen la pena? Y, claro. Porque los problemas, no abarcan ni una pequeña parte de lo que él nos hace sentir. Pues claro que valen la pena.
El problema no fue hallarte, el problema es olvidarte.
El problema no es tu ausencia, el problema es que te espero.
El problema no es problema, el problema es que me duele.
El problema no es que mientas, el problema es que te creo.
El problema no es que juegues, el problema es que es conmigo.
Si me gustaste por ser libre, quién soy yo para cambiarte.
Si me quedé queriendo solo, cómo hacer para obligarte.
El problema no es quererte, es que tú no sientas lo mismo.
¿Y cómo deshacerme de tí si no te tengo?
¿Cómo alejarme de tí si estás tan lejos?
Y es que el problema no es cambiarte, el problema es que no quiero.
El problema no es que duela, el problema es que me gusta.
El problema no es el daño, el problema son las huellas.
El problema no es lo que haces, el problema es que lo olvido.
El problema no es que digas, el problema es lo que callas.
26 agosto, 2010
Todos ven lo que no tienen ¿pero si dejaran de querer ser perfectos? ¿Y si en lugar de ver lo que falta vieran lo que hay? ¿Y si en lugar de ver lo malo vieran lo bueno?.
Y bueno, nadie es perfecto, así es la vida.
Cuando era chico tenía algo que ahora no tengo, algo que tengo que recuperar. Cuando era chico tenía fe. Cuando era chico me escondía del miedo cerrando los ojos y deseaba con el corazón que nada me pasara. Yo tenía fe, sabía que algún día todo iba a cambiar.
La falta de fe es falta de luz, porque la fe es creer en algo aunque no lo podamos ver. Perder la fe es estar convencidos de que eso que no está no va a estar nunca. La fe es una conquista que se pone a prueba todos los días. El que pierde la fe puede perder un juego, aunque lo esté ganando. Si uno pierde la fe se entrega a la muerte.
Si vos crees en algo, por más que todos te digan que estás loco, no dudes, tenete fe. No hay nada peor que darse por vencido, aún cuando veas todo negro, cuando no veas la salida, cuando creas que no vale la pena seguir creyendo en eso que creías: seguí, cerrá los ojos bien fuerte y tene fe.
23 agosto, 2010
Cada uno sabe cuál es el verdadero uno mismo, cuál es su parte luminosa y cuál es su parte oscura.
A veces hay que GRITAR, porque nuestra parte luminosa es también la más silenciosa, casi tímida. Entonces hay que ayudar a esa parte luminosa a que se imponga y que diga ‘acá mando yo’. Gritá, imponete, hacete oír. Mostrale a esa parte oscura quien manda, a veces hay que hacer un poco de lío. Gritá, gritá.
Nadie puede callar a nuestro yo verdadero. Por más que intenten silenciarlo, por más tímido que sea, siempre está ahí. La mejor parte de uno también es la más débil, la más calladita, entonces hay que ayudarla, hay que resistir.
Lo mejor de nosotros es nuestra parte sensible, y de tan sensible se queda muda ante el dolor, por eso hay que gritar. Porque si no gritamos, si no lo expulsamos, ese dolor nos puede terminar matando.
Gritá, hoy, ahora, ya. Mañana puede que sea demasiado tarde.
Todos buscamos la verdad. Todos queremos encontrarla, pero a veces la verdad nos encuentra a nosotros primero. La verdad siempre pulsa por salir a la luz. Está en su ADN, en su naturaleza, la verdad no resiste vivir en la oscuridad. La verdad ilumina, pero también proyecta sombras de eso mismo que ilumina. La verdad nos hace responsables, un mentiroso sobre todo es un gran irresponsable.
La verdad es una herramienta con la que podes construir o destruir.
De chicos lo aprendimos jugando. Buscamos y tememos la verdad, porque sabemos que toda verdad tiene su consecuencia.
Verdad. Hacemos lo imposible por poder tocarla.
Cuando buscamos la verdad lo que en realidad buscamos es su consecuencia. ¿Pero estamos listos para conocer la verdad? ¿Estamos listos para afrontar sus consecuencias? La verdad siempre tiene un precio ¿Estamos dispuestos a pagarlo?
Curiosidad, deseo, un sentido a nuestra vida. Eso es la verdad.
Hacerse cargo de la verdad y accionar, eso es consecuencia.
Consecuencia es lo que sigue a la verdad. Es en definitiva el motivo por el que buscamos la verdad.
Toda verdad tiene su consecuencia. Y toda mentira también tiene su consecuencia
18 agosto, 2010
Todo llega, dicen, y es verdad. El problema no es si llega, sino cuando llega.
Aveces las cosas llegan cuando ya es tarde, otras veces, lo que esperas llega antes, cuando no estas listo.
Todo tiene su momento, antes o después de ese momento, nada prospera.
El destiempo son dos calles que nunca se cruzan.
El destiempo es llegar cuando la fiesta terminó.
El destiempo no es sólo que algo te llegue tarde, es también llegar tarde a eso.
El destiempo es perder el tren.
El destiempo es como una fruta verde, amarga.
El destiempo es sabiduria que llega cuando ya no la necesitas.
El destiempo es una tarde fria en verano, es lo opuesto al lugar y la hora indicada.
El destiempo es una discusión entre solos.
El destiempo es una ironía.
Muchos dicen que con las decisiones que tomamos vamos construyendo un futuro, mejor o peor. Pero estaba pensado, ¿Cómo darse cuenta uno si la decisión que tomamos es correcta o no? ¿Cómo saber si las cosas van a mejorar, empeorar o tal vez quedarse como siempre? Nadie lo sabe, nadie. Podríamos decir que las elecciones que hacemos son por un tipo de "instinto" el cual muchas veces falla y esta falla puede herirnos a nosotros así como puede herir a otra persona relacionada con el problema, el problema o lo que sea. A lo que quiero llegar es que cuando las decisiones fallan no hay que darse por vencido somos humanos, nos equivocamos. Hay que entender que cuando alguien te hace mal o no es para vos por mas que sea difícil y nos parta el alma hay que mirar a un costado y dar lugar a esas cosas que son mejores, a esas cosas que nos esperan y que son lo que tanto necesitamos.
Hay que dar vuelta esa pagina, quemar el libro si es necesario y empezar otra historia con otra gente con otras ideas. Hay que entender que no todo se puede en la vida, que cuando se torna difícil y te hiere hay que terminarlo.
Todos tenemos un final feliz sólo hay que aprender a verlo.
13 agosto, 2010
RESISTE
Hay que hacer el cambio.
Sostener el cambio.
Aguantar el cambio.
Vislumbrar el cambio.
Sobrevivir el cambio.
Arriesgarse al cambio.
Soñar el cambio.
Intentar el cambio.
Luchar por el cambio.
Generar, construir, apostar por un mundo nuevo, mejor, para todos los que hacemos este planeta tierra, vivir la vida, vivir para la vida, vivir en la vida.
RESISTAN!
A veces pienso en los que viven en soledad, los que no comparten sus penas y sienten profundo dolor por ellos, no olvido que puede estar su familia, pero insisto que en determinadas situaciones de la vida sólo se puede enfrentar con ciertas personas. Para ser más exacto, en lo que respecta a mi, y agradezco a la vida haberlos conocido, en esas situaciones tengo a mis fieles compañeros de aventuras que me siguen y me respetan, que los sigo y los respeto, pero sobre todo a unos fieles y simples amigos. El principal componente que tiene la amistad es la confianza porque te permite actuar y hablar como quieras, la amistad no es algo que se pueda demostrar con palabras, si no que se muestra con hechos, con esos pequeños detalles que muchas veces pasan desapercibidos, la amistad es el mejor regalo que nos pudo brindar la vida.
Y con los ojos cerrados te seguí, si yo busqué dolor lo conseguí. No eres la persona que pensé, que creí, que pedí.
Mientes, me haces daño y
luego te arrepientes. Ya no tiene caso que lo intentes, no me quedan ganas de sentir.
Llegas cuando estoy a punto de olvidarte, busca tu camino en otra parte mientras busco el tiempo que perdí.
Y hoy estoy mejor sin ti.
08 agosto, 2010
Cuando te dicen que hay algo que no podes ver lo único que queres es ver eso que no podés. Así tengas que perseguir, ocultarte y espiar, vos vas a ver eso que queres ver.
Es como espiar por el ojo de una cerradura, como revisar un celular ajeno, nunca sabes con qué te vas a encontrar. Si espías sos responsable de lo que ves. Nunca sabes que vas a encontrar espiando por el ojo de la cerradura.
A todos nos gustas hurgar, chusmear, espiar, aunque a veces no estemos preparados para lo que podamos ver.
Mirando por la cerradura podes llegar a robar verdades, verdades que pueden doler, y mucho. El problema de espiar no es lo que se ve, sino todo lo que no se ve.
Mirar por el ojo de la cerradura nos da una visión limitada de la realidad, muy estrecha. Todo lo que queda afuera de lo que el ojo de la cerradura no nos deja ver es como si no existiera. Para ver por el ojo de una cerradura tenes que cerrar un ojo, ver solo una parte de la escena.
Es irresistible, siempre queremos saber qué hay del otro lado, pero ¿estamos preparados?
Todo lo que tenemos que ver está ahí, siempre está ahí a la vista, lo importante nunca está oculto.
Cuando queremos podemos ver con los ojos, con la nuca, con el alma, ver hasta lo invisible. Sólo se trata de querer ver.
Y a veces pienso cuando me quedo solo, te extraño, te lloro, que lindo arruinarse con vos. Y el día estuvo mal, hoy te soñé no quiero recordarte más, no me hace bien. Quisiera comprender que estás muy lejos y que no te importa nada de lo que me pasa. Y cada vez que pienso en vos, quiero volver y el brillo de tus ojos rojos yo quiero ver, detesto no saber si te acordas de mí o no te importa nada de lo que me pasa. Estoy un poco ansioso y se termina el día, ando buscando un poquitito de tu adrenalina y en mi cabeza encuentro sólo resignaciones. Estoy pagando el precio de mis buenas intenciones, en qué estaba pensando cuando me vine acá. Tiene que haber alguna buena forma de escapar. Si bien algunas cosas pudieron mejorar me está aburriendo esta mentira de la libertad.
07 agosto, 2010
Son tan perfectos recién sacados del paquete. Pero los mordemos, los destruimos y les quitamos la forma. Lo mismo pasa con algunas personas, les hacen daño, y nunca vuelven a ser como lo eran antes.
Y cuando el chicle ya no tiene sabor, cuando ya no te divierte más, y está insípido, ¿qué hacemos? Lo tiramos, lo escupimos y lo dejamos ahí, tirado y pegado en el suelo.
Eso mismo le pasa a las personas, que algún día, terminaremos tirados en el suelo.
sin miedo a quedar pegado a lo que puedan criticar
desnudo sin ponerse un buen disfraz
Quién se anima a mostrarse igual
a lo que es cuando nadie lo mira y nada tiene que ocultar
lo juzgan sin temor al que dirán
Yo te digo que es la solución
el mostrarse si es lo mejor
que rompamos las cadenas
que nos atan siglos
pero ya se como sos
De una vez se quien sos
de una vez vos y yo
porque con el corazón
vemos lo que otros no
04 agosto, 2010
La medida del dolor es el amor, no hay dudas, más amas, más grande es el dolor. No es el odio, no es la maldad, no es la injusticia lo que hace sufrir. Lo que duele es el amor.
El desinterés, la crueldad y la mentira de los que amas, eso es lo que duele, pero duele con un dolor que mata. No amar, no sentir, incluso odiar, es lo único que puede apagar este dolor.
02 agosto, 2010
Trató de estudiar y no puedo, trato de mirar una película y no puedo, trato de leer un libro y no puedo, es como estar en una habitación y que haya 10 personas alrededor tuyo gritando. Es insoportable, no me deja dormir, no me deja escuchar música, no me deja comer en paz.
Son esos momento en que deseo con todo mi ser volver a ser un nene de 8, 9 años y que mis preocupaciones sean buscar un buen lugar donde esconderme, no ser atrapado, correr hasta más no poder.
Quiero correr, escapar, desaparece un minuto aunque sea de la tierra. Mi conciencia necesita eso: un minuto de descanso, tan solo uno.